En invierno, alimentos para reforzar y prevenir
Si queremos aprovechar los beneficios que los alimentos nos pueden aportar en épocas de frío, lo primero que hay que hacer es seguir una dieta equilibrada basada en productos de temporada, entre los que debemos incluir determinados ingredientes especialmente adecuados para esta estación.
¿Qué alimentos debemos incluir en los menús de invierno?
En esta época del año, necesitamos alimentos que nos den calor y energía, que refuercen nuestro sistema inmunitario y que nos aporten buenas dosis de sustancias antioxidantes. Os recomiendo que en los menús diarios incluyáis ingredientes como los que propongo a continuación:
- Verduras y hortalizas de temporada: escarola, nabo, apio, col, chirivía, brócoli, calabaza, boniato, etc. Ah, y que no falten el ajo y la cebolla, con reconocidas propiedades medicinales preventivas y curativas.
- Entre las frutas, aprovechad naranjas, mandarinas, pomelos… Y no os olvidéis de los limones, que podéis utilizar para hacer aliños, en infusiones y en zumos o licuados.
- Cereales integrales, que, además de ser ricos en energía y nutrientes, ayudan a regular el sistema nervioso. En invierno, los cereales más adecuados son el arroz integral de grano corto, el mijo, la avena, la quinoa y, para los días más fríos, el trigo sarraceno.
- Legumbres, combinadas con cereales integrales, que aportan proteínas de calidad.
- Y no os olvidéis de consumir grasas buenas: aceite de oliva virgen extra, aceites de semillas sin refinar, frutos secos, semillas, etc.
- También os recomiendo utilizar hierbas aromáticas y especias como el tomillo, el romero, el jengibre, la nuez moscada, la canela y el clavo.
- Además, es interesante potenciar el uso de determinados alimentos, considerados medicinales en diversas culturas, que hoy en día podemos encontrar fácilmente en comercios especializados en alimentación natural:
- Son muy nutritivas y destacan por su alto contenido en minerales.
- Sésamo negro. Es más indicado que el blanco para los días de frío por su mayor concentración de nutrientes.
- Al ser un alimento fermentado, mantiene la flora intestinal en buen estado; es muy nutritivo y aporta calor.
De todos modos, como los virus son muy difíciles de controlar, si seguís todos estos consejos y aun así cogéis un catarro o la gripe, pensad que seguramente os recuperaréis más rápido y mejor. Y tened la certeza de que el esfuerzo no habrá sido en balde, porque habréis mejorado vuestros hábitos alimentarios, lo cual siempre es una buena inversión.
Assumpta Forteza
Dietista y asesora nutricional en Olioly
